07 Abr ¿Qué tienen que ver emprender y un cubo?
A lo largo de estos dos años que llevamos constituidos, nuestra productora audiovisual ha recibido multitud de encargos de diferentes empresas y fundaciones para hacer vídeos corporativos. A veces las empresas tienen muy claro lo que quieren; no es raro que te pongan un par de ejemplos y rápidamente se llegan a las condiciones. Sin embargo, en otras ocasiones, recibimos encargos en los que, además del tema técnico, se nos demanda también el aspecto creativo: se nos pide que, además de grabarlo, ideemos un vídeo corporativo diferente, original y rompedor.
Estamos viviendo un boom audiovisual. Por eso los vídeos son cada vez más baratos. Solo hay que ver la gran fuerza como buscador que ha alcanzado Youtube y, si echamos un vistazo a nuestros muros de Facebook, encontraremos una infinidad de gente que nos recomienda que veamos tal o cual vídeo. ¿Cómo podemos diferenciarnos del resto? ¿Cómo podemos atraer la atención de un público potencial cada vez menos impresionable? Sin duda, innovando: creando un vídeo original.
La Fundación InnDEA nos encargó, en 2014, un vídeo sobre las ayudas VLC Emprende –que se proyectaría el día de la gala– y nos dejó libertad absoluta para que creáramos un vídeo impactante, fresco y entretenido. Tras un par de reuniones creativas pensamos que, una buena analogía del emprendimiento es la del miedo a lo desconocido. El emprendedor, cuando decide crear su startup, renuncia a muchas cosas, se arriesga, se lo juega todo sin ninguna garantía. Así que nos pusimos manos a la obra y tradujimos esa sensación en imágenes. A veces, con un cubo, un chubasquero y un sistema de poleas –bastante rústico, por cierto– consigues transmitir una idea aparentemente compleja de un modo sencillo, divertido y eficaz.
No hay duda: la creatividad es, hoy en día, la herramienta que marca la diferencia.